Bendito sea Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de las misericordias y Dios de todo consuelo, que nos reconforta en todas nuestras tribulaciones, para que nosotros podamos dar a los que sufren el mismo consuelo que recibimos de Dios (2 Corintios 1,3-4).

Ticker

prueba

Reflexiones en Cuaresma Libranos del Maligno. Parte 2

Padre Doriam Rocha Vergara. Sacerdote de la Diócesis de Valledupar, Colombia.
Párroco en iglesia La Inmaculada Concepción.
Socio activo Asociación Internacional de Exorcistas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario